Albacete, feliz por la victoria pero desconforme


Los Pumas vencieron a Georgia y se metieron, por tercera vez en su historia, entre las mejores ocho seleccionados del mundo. Desde el exterior del vestuario argentino se escuchan gritos, risas y los clásicos cantitos tribuneros, que son sinónimo de alegría. Pero cuando Patricio Albacete encara a la prensa desde sus imponentes dos metros de altura, se pone serio y le baja un cambio a la efervesce
ncia clasificatoria. "Se logró el primer objetivo, pero lamentablemente no hay mucho que rescatar del partido de hoy", tira, de movida.
Dejamos bastante pero no todo, ya que pensábamos en el partido contra los all black’s y muchos no hiban al contacto por miedo de lesionarse y no poder jugar el partido importante que viene. Por eso mi disconformidad.

 Luego de un primer tiempo flojísimo, en el que se fueron al vestuario cayendo por 7 a 5, el seleccionado argentino subió su performance en el complemento, "En el entretiempo hablamos de todas las macanas que habíamos hecho y quedamos en que teníamos que tranquilizarnos. El próximo escollo de los dirigidos por Santiago Phelan serán, nada menos, que los All Blacks, dueños de casa y grandes favoritos para quedarse con la Copa William Webb Ellis. Sí, el panorama es negro oscuro, pero Albacete no se achica. "Es una oportunidad casi única y tenemos que aprovecharla. dice, convencido.

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